¡Llega el verano! Y con él, las escapadas a la playa, los baños en el mar o en la piscina, excursiones en bici con los amigos o la familia… ¡qué ganas teníamos de que llegara esta estación!

Se acercan los días calurosos y nos hemos puesto a recordar cómo eran los veranos de nuestra infancia: ¿recuerdas cómo era tu traje de baño? ¿A qué jugabas en la playa? ¿O los tuppers que preparaba tu madre cuando salíais de excursión los domingos? ¿Qué bocadillos comías? Queremos haceros recordar todos esos momentos, ¡qué bien lo pasábamos!

1. La nevera azul

¡Todo el mundo tenía una nevera azul! Para mantener fresquita la Casera, la Mirinda o conservar esos deliciosos platos que preparaba tu mamá con harina Yolanda como la tortilla de patatas sin huevo o el pollo rebozado crujiente. La nevera azul siempre os acompañaba a la playa, ¡qué recuerdos! Y todos esos platos siempre iban dentro de un tupper, ¡cuántos tuppers cabían en esa nevera!

2. Las cangrejeras

Si tu playa era de roca, ¡tenías unas sí o sí! Para caminar sin lastimarte los pies, las cangrejeras eran tus compañeras de juego. ¿Alguien tiene un par aún?

3. Los helados

¡No era un día de playa completo sin pasar por el chiringuito a por tu helado favorito! Y los de Frigo estaban deliciosos, ¿cuál te pedías tú siempre? ¡A nosotros nos encantaba el Drácula! Madre mía si veis los precios veréis que un helado «Popeye» de limón ¡valía 20 ptas!

4. Paseos en bicicleta como en Verano Azul

Te juntabas con tus amigos y os recorríais todo el pueblo en bicicleta, sin ningún tipo de protección ni seguridad… Oye y no pasaba nada, te caías y te levantabas… como mucho tu madre te echaba mercromina ¡y no pasaba «na»!

5. La sombrilla de playa

Esta sombrilla azul y blanca estaba en todas las playas, ¡cuántos recuerdos! Esos madrugones que te pegabas para bajarla a las 8 de la mañana y pillar «un sitiazo» en primera fila, ¿y para qué? Si luego a media mañana subía la marea ¡y te calabas entero!

6. La mesa plegable «de toda la vida»

¿Con qué material hacían estas mesas? ¡Ya nos las hacen tan buenas! Te ibas con toda la familia a la playa… y cuando decimos «toda la familia» es TODA LA FAMILIA: Abuelos, nietos, cuñados, cuñadas, padres, hijos, hermanos, la hija de tu vecino que no sabes cómo pero se apuntaba al viaje… y esa mesa aguantaba las botellas de coca cola de 2 litros, los botes de cerveza, los dos mil tuppers de comida… ¡y duraba años y años!

Ahora os toca a vosotros, ¿qué otros elementos no faltaban en vuestros veranos?