Durante todo este verano hemos escuchado hablar de museos, visitas turísticas y ¡muchos viajes!  Reconocemos que nos encanta salir y conocer todos los museos de la ciudad. pero hay una clase de museos a los que no se les suele prestar demasiada atención, y que suponemos os interesarán a los que os pasáis por aquí: los museos gastronómicos.

¡Hacemos un tour!

– Museo Vasco de Gastronomía. Situado en un gran caserón del siglo XIX, podremos encontrar muestras de la evolución de las técnicas de cocción, ¡seguro que os encanta! Desde los tiempos del horno de leña hasta las modernas vitrocerámicas, ¿recordáis cómo cocinaban las abuelitas?, y una fiel reproducción de la cocina de un restaurante, pero sin duda destaca sobre todo una enorme colección de menús de restaurantes de todo el mundo que abre el apetito sólo con leerla. ¿Quién se anima a visitar este museo?

– Asturias cuenta también con ofertas interesantes, y muy típicas, como el Museo del Cabrales y el Museo de la Sidra. El primero está situado en una cueva natural donde en visitas guiadas se puede conocer todo sobre la historia y la elaboración del queso más famoso de Asturias ¡con degustación incluida! Y el segundo, situado en la Villa de Nava, a 30 kilómetros de Oviedo, ofrece una exposición participativa que permite a los visitantes conocer todo lo que deseen relacionado con esta bebida característica.

– En la localidad madrileña de Villaconejos encontraremos el Museo del Melón, ¡de visita obligatoria en verano! Además no se limita a informar sobre esta fruta, sino que hace hincapié en la vida de los agricultores como lo cultivaban y recolección. Algo parecido es lo que ocurre en la localidad de Burriana (Castellón) donde podremos visitar el Museo de la Naranja cuenta la historia de la industria tradicional dedicada al cultivo de las naranjas, y ofrece un genial archivo de 6.000 documentos, entre fotografías, etiquetas y papel de seda, que suponen todo un testimonio histórico y cultural. En la Iglesia de San Juan, en Mayorga de Campos (Valladolid), se encuentra el Museo del Pan, algo nos dice que este museo os va a encantar.

– Además empresas gastronómicas se han animado y han creado también sus propios museos. Es el caso de la casa Valor, que muestra toda su tradición chocolatera en su Museo del Chocolate, si te pasas por la localidad alicantina de Villajoyosa ¡tienes que verlo! Guarda una amplia colección de objetos y recuerdos relacionados con su producción y fabricación. ¿Habrá degustaciones?

¿Conoces algún otro museo?